lunes, 11 de febrero de 2019

El síndrome triple XXXX o de la superhembra es una aneuploidía cromosómica o cambio numérico de los cromosomas que se presenta en mujeres que poseen un cromosoma X extra. Se trata de individuos femeninos con órganos sexuales atrofiados, fertilidad limitada y coeficiente intelectual normal. Su incidencia es de aproximadamente 1 de cada 1.500 niñas. Los padres o las niñas afectadas probablemente no lleguen a darse cuenta de la presencia de esta enfermedad, a menos que se sometan a los exámenes médicos pertinentes.
Las niñas y mujeres que tienen el síndrome XXX tienen tres cromosomas X en lugar de dos, que es lo habitual. Este cambio de cromosomas se escribe "47, (XXX)". Esto significa que hay 47 cromosomas en lugar de 46. El cromosoma X extra se obtuvo durante la formación del espermatozoide o del óvulo antes de su unión para formar el embrión, o durante el desarrollo temprano del embrión poco después de la fecundación. Este cromosoma extra no puede ser eliminado nunca; el cambio en el cromosoma que causa el síndrome de la superhembra no puede ser revertido.
SINTOMAS Y SIGNOS
Las recién nacidas y las niñas con 47, (XXX) se parecen a otras niñas de su edad. Suelen ser más altas que el resto de las niñas en su familia y pueden tener menos coordinación.
De todas las condiciones de cromosomas del sexo, este síndrome es uno de los que se asocian más con problemas mentales y de comportamiento. Una probabilidad alta de tener problemas en el lenguaje y en el habla pueden causar retrasos en las habilidades sociales y de aprendizaje. Por consiguiente, estas niñas suelen necesitar ayuda adicional para tener éxito en la escuela.


Comunicación con el feto durante el embarazo

 Así como las situaciones de estrés o depresión materna tienen efectos negativos sobre el niño por nacer, comunicarse con el bebé en el embarazo es muy beneficioso para su desarrollo emocional.
 La personita que se está gestando es un ser sensible, con una gran capacidad para procesar los estímulos que provienen del exterior. Puede escuchar la voz de sus padres, la música y sentir las caricias.
  Estar conectados con el bebé, sentirlo y hablarle contribuye a crear un vínculo afectivo temprano con el hijo por nacer, incluso antes de verle la carita. Además, conectar con el bebé le permite a la madre disfrutar más plenamente de su embarazo.

viernes, 8 de febrero de 2019

Transgénicos

  Los alimentos transgénicos son aquellos que han sido producidos a partir de un organismo modificado mediante ingeniería genética y al que se le han incorporado genes de otro organismo para producir las características deseadas.​